Sesión 10 de junio del 2009


Prolegómenos ala discusión sobre la mistificación del mercado y el capitalismo
Franz Hinkelammert

¿Qué mueve al capitalismo?

Ni el capital ni el dinero, sino el mito del capitalismo es lo que lo mueve. Si no entendemos esto, no entendemos porqué tiene tanta fuerza, lo mismo que no entendemos la debilidad de la izquierda para enfrentarlo.

Sin los mitos no hay ninguna rebelión, pues no se pueden interpretar los intereses materiales de una manera radicalmente diferente a la del sistema. Por eso, si ahora no reflexionamos las interpretaciones de los hechos, no las podemos contestar y la gente se incorpora al sistema porque si no se pierden.

El sistema no da los intereses, pero si los define. Esto es lo que se inculca en las grandes mayorías. Si no tengo otra manera de ver los intereses, pierdo… esto es lo que dan los mitos.

A veces hablamos de metáforas, pero las dejamos intocadas en cuanto son mito. Son metáforas en el lenguaje académico, pero cuando se salen de la academia y son internalizadas por las personas se tornan mito… Ejemplo, Lucifer, cuando el nombre se transforma en nombre del diablo; a partir de ese momento, a los que asaltan el poder se los nombre “Lucifer” y se los envía al infierno. Por eso Hitler, Popper y los evangélicos fundamentalistas gringos son anti-luciferianos…

Los intereses son intereses interpretados y el conjunto de intereses interpretados forman parte de un conjunto cosmológico. Los intereses no están a la vista, pero se los pone a la vista a través de los mitos del poder y de los mitos de liberación.

Cuando pan y reino de libertad se unen, hay movimiento. La reivindicación en nombre de un “reino de libertad” se ha perdido y hay que recuperarla, pero no como problema académico, sino como problema práctico.

¿Cuáles son estos grandes mitos que han movido a las poblaciones?

Allende ganó en Chile estando vinculado con la teología de la liberación, porque entonces si podían responder desde el plano mítico al embate del capital. Entonces, no se gana por los intereses sino por los mitos que los interpretan.

El comunismo (reino de libertad) es el gran mito que mueve el siglo XIX. No es la falta de pan lo que mueve a la rebelión, pero cuando converge con el reclamo por el reino de libertad, entonces si produce la revolución.



El capitalismo no es movido por el capital ni por el dinero; pero sí es movido por el mito del capital y por el mito del dinero.
¿Cómo contestar estos mitos?

Solo se los puede contestar/enfrentar con otros mitos

Como la izquierda perdió en gran parte la capacidad de responder estos mitos, perdió también en la realidad.

Hay un desprecio de la izquierda hacia los mitos, los invisibiliza. Chonsky, a pesar de su brillantez, es ciego a esto; él cree que con mostrar las barbaridades del mundo va a provocar la movilización. Sin embargo, ver la barbarie no genera el movimiento, ante ello se puede llorar, se puede generar solidaridad, pero si se lo admite como inevitable, no genera ningún movimiento.

La estructura dominante del pensar sobre las barbaridades está en el mito del progreso. Para este mito, la barbaridad es necesaria si se quiere el progreso. Si queremos progreso, vamos a tener víctimas, por eso si hay las víctimas este es el precio por el progreso.

¿Cómo se rompe este conjunto?

Por eso insisto en la discusión mítica y sobre el lugar y la manera de pensar las alternativas. La discusión sobre donde pensar un mundo en el cual las barbaridades que ocurren son barbaridades, y las alternativas son un paso frente a la barbaridad.

¿Cuál es el mundo de sentido en el cual la rebelión contra el sujeto es lo humano verdadero? Esto está en Nietszche. Para él, quien cae ayuda a que otro se levante; por eso, quien caiga hay que empujarlo para que caiga… y no sufra… que otro se levantará. Y esto es lo que considera valioso. Esto es transformado en lo verdadero: ejemplo, la mano invisible.

Por el contrario, hay que proponer un mito alternativo: yo vivo si tu vives, yo no caigo si tu no caes… A partir de esto, se repiensa un reino de libertad.

Lo que era el comunismo del siglo XIX tiene su lugar, aunque hay imaginaciones del reino de libertad en muchas otras partes y épocas.



Walter Benjamín vuelve a lo mesiánico
Todo antiutopismo es antisemitismo.

Hay que hacer el análisis del fetichismo de la mercancía, pero a la vez el análisis de la respuesta del fetichismo de la mercancía.  Cuando solo se muestra el fetichismo de la mercancía no lo estamos respondiendo.


Diálogo

Carlos Cruz: Pienso en la Teología de la liberación… ¿esta idea de la necesidad de unir pan y reino de la libertad es lo que sostiene la insuficiencia que significa el solo demostrar lo irracional de lo racionalizado si no se tiene la fe en otra sociedad posible?

Walter Antillón: Si vemos el mito del inca, no debemos olvidar que el inca es un usurpador, que se hace con el poder y domina pueblos que no son del inca. Por eso en Bolivia no se menciona el inca, porque es un usurpador, pero si se menciona el aymará.

Franz Hinkelammert: Cierto, por eso en el primer siglo de la conquista no se lo menciona, pero luego se lo recupera como una edad de oro.

Carlos Cruz: ¿Asociamos el inca con el imperio incaico?

Angel: Si recordamos que Hernán Cortés tomó el mito del quinto sol de los aztecas… Esto deberá empatar con el tema sociológico de la ideología, pero en el postmodernismo se decretó que la ideología había muerto, y aunque se rechace, esto terminó aceptándose en la práctica…

Norman:

Henry Mora: Dos interrogantes: Franz, dijo que el mito del Cristo resucitado debería ser para la izquierda lo que el mito del Cristo crucificado ha sido para los conservadores y la derecha. ¿Podrías profundizar esta idea en relación con el fracaso de la izquierda?

Franz Hinkelammert: La ortodoxia rusa no tiene en el centro el Cristo crucificado, sino el Cristo resucitado; la Pascua es su principal fiesta del año… Yo creo que este es un marco mítico más propicio para formar un pensamiento revolucionario que el occidental, donde el Cristo es un Cristo crucificado, que se muere y si bien tiene su resurrección, pero el centro es la muerte.

Henry Mora: Cuando Franz introdujo la figura de Guillermo Tell, y su significado para la cultura alemana, me llamó la atención que en Costa Rica el personaje es Juan Santamaría. Durante la discusión del TLC, los primeros en usar las expresiones sobre el mito fueron los del Si, para descalificar a los del NO. Me preocupa que esta constante se mantiene y sigue jugando actualmente…

Walte Antillón: Una nota histórica: en el año 1865 salió un decreto fijándole pensión a la madre de Santamaría. Es el gobierno contrario a Juanito Mora. Parece que se dieron cuenta que era importante contrastar la gesta de Mora con una figura neutral… así, es una figura popular.

Carlos Cruz: Esta necesidad de crear mitos es fundamental. La identidad nacional es la creación de un ancestro, de un tótem. La discusión no está en el dato histórico sobre la existencia de Santamaría, sino sobre la construcción como imaginario de identidad nacional.

Norman:

Ángel: En el relato de la Virgen de los Ángeles siempre se ve el conflicto entre poblaciones, pero esto es sospechoso. Por otra parte, no hay que confundir mito con religión… hay mitos laicos. Así, hay una parte fundamental que invisibilizamos, como es el deporte, en particular el fútbol… este moviliza a latinoamericanos, pues genera un proceso de identidad muy marcado.

Ronald Rivera: Hay un desplazamiento de conceptos para producir discursos… Me llama la atención este desplazamiento o dislocación…

Anamaría Hernández: Los personajes que se crean no son tan neutros, sino que buscan representar a la población con la que se tiene conflicto para calmarla, someterla… En una investigación sobre cómo percibe la población la participación de las mujeres en política, resultaba que la mayoría de las personas entrevistadas buscan una gran mamá que venga a hacer lo que los hombres no han podido hacer y con características sensibles, para el cambio político que los hombres no han hecho.  Esta es la esperanza del cambio, que haga posible la justicia… porque este es el papel que tienen las mujeres en las familias. Si hay un manejo laico de los mitos religiosos

Henry Mora: Prácticamente los héroes en América Latina, fueron líderes de la independencia, pero en Costa Rica el héroe tiene otras características.

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